Con aire adolescente, ritmo de hip hop, efectos especiales espectaculares aunque no engañosos, Las Tortugas Ninja llegan a la nueva generación de espectadores con un sólo objetivo: entretener sin perder el espíritu original. ¿Lo consiguen?
La trama nos muestra la ciudad de Nueva York asediada por el Clan del Pie, que está causando estragos allá por donde aparece, cometiendo vandalismo, atracos y destrozos. En una de estas acciones, un misterioso justiciero les hace frente y vence sin demasiada dificultad.
La periodista April O’Neil es testigo del suceso, aunque no consigue identificar al héroe, de modo que comienza a buscarle sin tregua, hasta descubrir que en realidad son 4 héroes, que además son tortugas y que son mutantes, ah! y ninjas y, eso sí, adolescentes, las Tortugas Mutantes Ninja Adolescentes. Hasta el propio Raphael reconoce que suena ridículo.
Cada tortuga tiene definida perfectamente su propia personalidad, incluso diría que mejor que la serie de animación. Ya las conocemos, pero esto es lo que muestra la película: Leonardo es honorable y el líder, bastante más maduro que el resto; Raphael es el más duro de todos y por eso le han marcado una musculatura asombrosa y brutal, también el que peor carácter muestra; Michaelangelo es el más aniñado, un adolescente en toda regla; Donatello es un genio de la tecnología y la ciencia, más débil físicamente que el resto, incluso precisa de lentes de contacto, pero con una capacidad intelectual mucho mayor.
Megan Fox interpreta a April y gana un peso importante como protagonista en el film, con ciertos altibajos según qué escena. La gestualización de Fox poniendo morros ante la cámara o dejando ver sus brillantes ojos sin pestañear no casan con algunas escenas, sin embargo en las de mayor dramatismo sí consigue encauzar su personaje correctamente. Si de verdad la actriz quiere desligarse de la imagen de niña bonita para demostrar una mayor valía a sus interpretaciones debería rechazar secuencias de posado innecesarias o directamente papeles que la exploten por su físico.
El resto del reparto se completa en primer lugar con una rata Splinter cercana a las series de animación real (con marionetas) de los 80, nostálgica, algo repelente y asquerosa, pero con una animación digital en sus movimientos de altura.
William Fichtner es Sacks, uno de los pilares del argumento como Vernon Fenwick (Will Arnett), compañero de April y quien conduce la furgoneta que luego se transformará en el vehículo oficial de las Tortugas Ninja.
Uno de los aspectos más preocupantes de este film en cuanto se planteó era, obviamente, la presentación física de las protagonistas anfibias. Se ha optado por una caracterización realística, dentro de lo que una tortuga mutante podría ofrecer, con cierto aspecto humanizado. En nuestra opinión el resultado es perfecto, pues ni se busca un diseño demasiado estrambótico ni se pierde el aire infantil que rodea a estos personajes desde su primera aparición en televisión (el cómic era otra historia).
Como si de un capítulo más estuviéramos hablando, la sucesión de acciones contra el Clan del Pie es constante. Se nota cierta falta de ritmo durante los primeros 25 minutos de la película, en los que se intenta presentar a unos personajes que realmente no necesitan una introducción tan extensa pues son de sobra conocidos por todos. Además, la vinculación de la trama de la infancia de April con la verdadera existencia de las tortugas es tan innecesaria como típica en esta clase de películas familiares.
Por descontado, tenemos que hablar de Shredder, presentado aquí como un viejo maestro de artes marciales y señor de la guerra japonés, para quien preparan el conocido traje de combate, con excesivos cuchillos para mi gusto, pero realmente efectivo contra sus oponentes. Tendremos dos principales enfrentamientos, el de Shredder contra Splinter, espectacular aunque predecible y el de Shredder contra todas las tortugas, el más entretenido de todos y con escenas épicas en su desarrollo, aunque cierta desigualdad entre el poderoso traje de Shredder y la incompetencia de las Tortugas Ninja para preparar sus ataques.
Respecto a nuestros queridos personajes, cumplen con creces en cada toma que les enfoca. La presencia de ellas es sinónimo de entretenimiento y diversión, no bajan el ritmo en ningún momento de la película. Quizás pueda parecer mareante el movimiento de sus acciones, como el traslado entre tuberías de las cloacas o el descenso por la nieve, pero es innegable su espectacularidad.
Quizás miremos con cierto escepticismo algunas trampas de guión como que las tortugas son resistentes a las balas, su mutágeno les permite regenerarse a ellas y a otras especies o que Megan Fox se la juegue a Shredder en más de una ocasión. En todo caso, si eres fan de las Tortugas Ninja y puedes eliminar prejuicios sobre qué película es mejor o cómo deberían aparecer estos superhéroes del subsuelo ante nuestros ojos, entonces disfrutarás de más de hora y media de acrobacias, combates ninja y algún Cowabunga que otro.