Tras el éxito de V/H/S por su publicidad online, V/H/S 2 era inevitable. La premisa es similar a la original, con una pareja de investigadores entrando en la casa donde vivía un joven qie lleva tiempo desaparecido. Al llegar allí encuentran unas cintas VHS. Cada una de estas cintas presenta, cámara en mano, una historia de terror sobrenatural.
En lugar de las 5 historias de la primera parte, esta vez tenemos tan sólo 4, con lo que cada una tiene mayor duración y los directores implicados podían explayarse mejor en la presentación de cada trama o en el transcurso de la acción, cada uno decide cómo hacer su historia.
Vamos a ir de mejor a peor, de forma parecida a como hicimos con la crítica de V/H/S. La más original por tratamiento que no por planteamiento es la 2ª, de nombre A Ride In The Park y dirigida por Eduardo Sánchez y Greg Hale.
Con unos diálogos mínimos, asistimos a una epidemia zombie originada sin previo aviso en medio de un parque donde la gente va a ir en bici, hacer deporte, celebrar cumpleaños, intimar… etc. La presentación de los muertos vivientes es como la de Amanecer de los muertos, de día, con estos seres corriendo a toda leche y con mucha sangre.
Presenciamos actos terribles, pero al mismo tiempo originales, mezclando humor y violencia gráfica hasta abrazar un gore light que hará las «delicias» de todo aficionado al género zombie. Por ritmo y efectos especiales es la mejor de todas las historias.
La 3ª nos ha gustado mucho, se trata de Safe Haven, también obra de dos directores, Timo Tjahjanto y Gareth Evans. En esta ocasión unos reporteros acuden a una comuna sectaria donde se están produciendo supuestamente actos de pedofilia. Lamentablemente, estas sospechas son el principio de algo mucho más terrible.
Con rencillas y traiciones internas entremezcladas en la historia, los 4 reporteros graban con sus cámaras un suicidio colectivo cuyo fin último es el de renacer en un nuevo plano de existencia. Dejamos al espectador descubrir si finalmente lo consiguen y cómo se las apañan los reporteros por no formar parte de este asesinato en masa auto inducido.
Cinematográficamente la historia plantea originales enfoques de la grabación cámara en mano, así como una historia con base realista repleta de potencial. Lamentablemente, los minutos se antojan escasos y la conclusión final es menos sorprendente. Junto a esto, los directores optan por consabidos planos de lentitud extrema que ralentizan demasiado la acción, en la que algunos sustos y sorpresas llegan demasiado tarde. Pese a ello, es una historia muy sólida y presenta un entorno realmente terrorífico de una comunidad que pasa de una quietud extrema a la más absoluta locura.
En 3er lugar colocamos la primera historia presentada, de nombre Clinical Trials, dirigida por Adam Wingard. En ella un hombre pierde un ojo en un accidente y se acoge a un sistema experimental en el que le implantan un ojo robótico. A cambio de costear el tratamiento, los científicos quieren grabar todo lo que ve a través de este «periférico».
Lo que el protagonista no sabe es que este implante tiene como efectos secundarios poder ver espíritus, así como también que ellos se percaten de su existencia, de forma que el regreso a casa se convierte en un continuo ataque de sustos y agresiones espirituales.
La historia asusta y da miedo, pero conforme avanza la trama comprobamos que no tiene mayor complejidad que la planteada en líneas anteriores. También es original el punto de vista del ojo (humano o no), pero no es suficiente para explotar una historia que, por sí sola, tiene potencial para sorprender a cualquier espectador. ¡Se podría hacer incluso una serie de televisión en torno a ella! Con todo, no decepciona.
La última historia es también, para nosotros, la menos interesante. Jason Eisener nos ofrece en Alien Abduction Slumber Party a adolescentes y preadolescentes juntos en una casa sin padres, haciéndose gamberradas unos a otros. La fiesta termina con una invasión alienígena algo caótica, que es grabada por la cámara de uno de los presentes. No nos han gustado ni los enfoques escogidos, ni el ritmo de la acción, ni siquiera la historia en general. Una invasión alienígena requiere muchísima creatividad en su planteamiento, cuando otra opción similar como la de unos ladrones que entran en casa habría sido más realista y efectivo. Es la peor historia con diferencia.
Aunque no faltará quien argumente como lamentable la narración que sirve de nexo común (Tape 49), con apenas dos sustos, totalmente incoherente y muy por debajo de las historias planteadas en las cintas.
En definitiva, V/H/S 2 mejora con creces las historias de la primera parte con propuestas más originales y mejor trabajadas. Sin embargo, siguen sin aprovechar todo el potencial que tienen de primeras y no disfrutan de un nexo común de calidad. Un nuevo intento más acertado, pero de nuevo imperfecto.
Imágenes: Cortesía Magnet Releasing