Pese a que Pesadilla en Elm Street 5: The Dream Child se estrenó en 1989, lo cierto es que toda la estética que posteriormente abrazaría las películas juveniles de los 90, ya se encontraban en cierta medida en esta película.
Pasamos de los tristes y oscuros años 80 a lugares llenos de colorido, ropas estrafalarias, sombreros femeninos, glam metal y hip hop en sonido y vestimenta de muchos hombres y, en cuestión cinematográfica, la animación electrónica combinada con poderosos efectos de animación digital. Son los años 90.
Esta quinta entrega continúa la línea narrativa de la quinta parte, en la que Alice y Dan, supervivientes de su enfrentamiento contra Freddy Krueger, han continuado su vida como pareja y están a punto de graduarse del Instituto. El padre de Alice está recuperado de su adicción a la bebida y los amigos de la joven conocen la existencia de las pesadillas de su pasado, aunque en el fondo no creen que todo sea realmente cierto.
Al quedarse embarazada Alice, Freddy encuentra una ocasión para volver a hacer de las suyas y colarse en las pesadillas de todos los protagonistas, para hacerles sufrir lo inimaginable. Curiosamente en Pesadilla en Elm Street 5, las muertes son muy escasas (apenas 3), pero se enriquece el argumento de la tercera parte, considerado el más completo hasta entonces. Entenderemos la personalidad de la madre de Freddy y cómo fue asediada por cientos de psicópatas encerrados en un psiquiátrico, así como la propia personalidad de Freddy en relación principalmente con los niños.
También contamos con una dirección de excepción, Stephen Hopkins, quien al año siguiente nos traería otra secuela no menos conocida, Deprerador 2. Hopkins aboga en la quinta pesadilla por unas secuencias mucho más desarrolladas en la muerte de los protagonistas, bastante más detallistas, violentas y sangrientas, apoyadas con unos efectos especiales que superan a todas las entregas precedentes. Sin embargo, el montaje de la historia general así como el enfrentamiento final entre Alice y Freddy es tan caótico como desconcertante y adolece de grandes fallos a nivel visual, que podrían haberse evitado con un poco más de creatividad en su aplicación.
La historia se vuelve algo más relevante que la cuarta entrega, pero sigue sin encandilar tanto como la tercera parte. Aún así las críticas hacia la película por parte de los fans fueron generalmente positivas y la recaudación en taquilla, considerable. Sería además el punto y final a la línea argumental principal, que en la segunda parte y en la sexta fue totalmente omitida y en la séptima y octava (Freddy contra Jason), deliberadamente modificada.
Los fans de Freddy podrán con Pesadilla en Elm Street 5, dar por concluida así la historia que comenzó con Nancy aterrorizada y que termina con más comedia que nunca con Alice embarazada. No obstante, las pesadillas continuarán, como todos ya sabemos.
Póster: IMP Awards